que los espíritus no tienen problemas de tráfico y velozmente llegan a visitarnos, a comerse sus ofrendas, a dejar lo que no se vea apetitoso y a echarse a dormir un rato en la cama de flores (con el distintivo símbolo cortesía de la hibridación cultural)
que los tamales, el pan de muerto, el dulce de calabaza, el chocolate y los bollitos nunca han faltado ni faltarán en mi casa (y, qué demonios, como dijo Wycleaf Jean: mi casa, su casa)
que, y aunque ése es discurso de Día de Gracias (coming soon), seguimos todos aquí y no tenemos que tomar el mictlán-taxi para pasar unas horas juntos
y, finalmente, que mi bici nunca me ha fallado porque, oh dios, con tanta necro-comida ya pesaría más de setenta kilos (con mis escasos sesenta y tantos centímetros)
y, finalmente, que mi bici nunca me ha fallado porque, oh dios, con tanta necro-comida ya pesaría más de setenta kilos (con mis escasos sesenta y tantos centímetros)
... es también importante recordar una celebración ineludible: el cumpleaños de nuestro querido mexican-Alf, el pequeño monstruo que decidimos adoptar mucho antes de que todo este asunto de los blogs fuese siquiera una idea:
¡Feliz Día de Muertos a todos!
¡Y Feliz cumpleaños, Jefe!
¡Y Feliz cumpleaños, Jefe!
6 comentarios:
Se me hace que estoy igual con eso de la necro-comida, ni modo... a la bicicleta también!
"De saber que venías, te tendría un pastel..." Clásico de Clásicos...
I love the cookie monster...
Un abrazo...
All Hail CooKiE!!!
Jefe, hace mucho. Jefe, para mucho.
Asmodeus: Debemos ser varios millones. Jaja. Si todos nos volviéramos ciclistas.. uy
Hijo del Pop: El Jefe lo agradece :D
Vil: el Jefe sigue molesto
Queridita: El Jefe planea contratarte como asesora de propaganda y slogans de la república que dirige.
...un pastel, un pastel
De saber que vendrías te tendría un paste, un pastel, un pastel...
Publicar un comentario